FaBulARio

17.4.04

Amor y costumbre

Quizás porque soy un animal de costumbres, creo en la costumbre, y la costumbre es como un matemático sentimental, que coloca trozos de la vida de forma simétrica, que construye el espacio de siempre con reglas, que rompe los espejos para hacer puzles con los que entretener a las imágenes.
Inventar un camino de ida y otro de vuelta con las huellas de ayer. Soy un animal de costumbres.

Por eso, no me digas con tristeza que he convertido nuestro amor en una costumbre, porque yo soy un animal de costumbres. Cuando me lavo la cara ante el espejo, sé que te amo. Cuando me tomo el café, sé que te amo. Cuando me cepillo los dientes, sé que te amo. Cuando cierro la puerta, sé que te amo, y cuando la abro, esa llave inconfundible que puede más que el tiempo me dice, entonces, que te amo también.

Espero que el amor siempre sea una costumbre. Y si tú me dices que las costumbres te aburren, que necesitas una novedad para romper la rutina del amor, entonces te diré que hagas tus maletas y salgas de mi cama. No voy a perder el tiempo con alguien que no quiere acostumbrarse a amarme.